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| Así no se puede seguir, nuevamente la cobardía de Rexach, ha servido para perder un partido que con un planteamiento mas ofensivo, otro gallo hubiera cantado. La Roma sin hacer nada, ha complicado al Barça los cuartos de final. Con el conservadurismo, que esta jugando últimamente el Barcelona, cualquier equipo con poco que haga, puede ganarle, eso le paso al Valencia y eso le ha pasado hoy a la Roma que sin hacer nada del otro Mundo, ha ganado nada menos que por 3-0, aunque también hay que tener en cuenta que la defensa blaugrana es el Papa Noel, donde reparte regalos a todo el Mundo. Hoy si el Barcelona hubiese arriesgado un poco, ahora estaríamos hablando de otro | |||
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resultado, ya que los romanos a lo largo de los 90 minutos han sido dominados por un Barça que le ha sobrado conformismo y le ha faltado un técnico con valentía que les mandara jugar al ataque. Parece mentira que la Roma que ha tirado a puerta cuatro veces, haya marcado tres goles, y el Barça que ha sido dueño del balón gran parte de los 90 minutos, no haya sido capaz de marcar ni tan solo uno, y es que el miedo a perder despues pasa factura, eso le ha pasado al Barça, que ha salido a defender el empate, y al final lo ha pagado muy caro.
Con esta derrota el Barça deja su liderato del grupo en manos del equipo italiano, en un partido de neto control y dominio barcelonista en la primera mitad, pero que desequilibró del lado local merced al afortunado primer tanto, obra de Emerson en cuyo tacón dio un disparo de Candela. El gol casual de Emerson, desde luego, valió su peso en oro y le abrió a su equipo el camino de un triunfo que se veía difícil y, además, lográndolo con un abultado marcador que castiga en exceso a un Barcelona que se rompió tras el tanto. Rivaldo finalmente jugó. El brasileño peleó, suyos fueron los disparos lejanos del Barcelona, pero evidenció no estar en plenitud física. Además, como Kluivert, pagó el control, sin arriesgar, de su equipo. El Barcelona se encontró con una Roma que evidenció que sufre, y mucho, cuando se ve obligado a construir el partido. Está incómodo. Lo contrario que cuando es el rival quien ataca. Y es que la maniobra de la Roma es muy previsible, las ideas apenas existen, su juego es espeso y se limita a balones largos, acciones por las bandas en busca de que el brasileño Cafú y el francés Vincent Candela desequilibren con su rapidez y calidad, y a alguna que otra genialidad individual. Totti, la 'estrella' local, pese a jugar en su posición preferida (detrás de las puntas), no construyó y el 'tridente' ofensivo puesto por Fabio Capello no inquietó, pues ni Batistuta ni Delvecchio recibían en condiciones. Esto dio un primer tiempo muy táctico, de control azulgrana y desquiciamiento romanista, y sin gran peligro para las metas. Lo más destacado fue un centro de Delvecchio al que Batistuta no llegó (m.16) y, casi a continuación, un disparo raso de Rivaldo desviado a córner por el meta Antonioli (m.17). En el descanso, con un Roma que no había disparado una sola vez a meta, Capello intentó variar la cara ofensiva de su equipo, dándole más peso y llegada con la entrada del 'salvador' Vincenzo Montella por Delvecchio. La Roma empujó más, siempre merced a balones largos y no construidos, pero, con el primer disparo sobre la meta de Reina (m.56), que despejó de puños a remate centrado de Totti, evidenció que las cosas habían cambiado. Dos minutos antes, Antonioli se tuvo que emplear más a fondo a un buen disparo de Rivaldo. El Barcelona había cedido más espacios, jugaba más atrás, y ello creció a la Roma. Un equipo romano que muy pronto, en jugada con la fortuna de su lado, se adelantó en el marcador: un disparo de Candela dio en el tacón de Emerson, lo que despistó a Reina, y se coló. Era un inmerecido 1-0 (m.61). El equipo catalán daba muestras ya de estar 'tocado' y, tres minutos después, vio como un disparo de Totti se colaba en su metas. Pero el colegiado Nielsen lo anuló por un fuera de juego posicional. Inmeditamente Rexach movió ficha y sacó al holandés Overmans por Motta. La Roma ya jugaba como le gusta, a no tener que crear, a esperar la apertura de líneas del rival, y a lanzar el contragolpe. Capello, no obstante, pronto evidenció su deseo de 'amarrar' y quitó a un Batistuta inexistente para reforzar su centro del campo con Tommasi. Además, poco después del cambio, las cosas se le pusieron aún más favorables a la Roma, que anotó el 2-0 en una bella acción del "planeador" Montella (m.74). El partido, pese a los nuevos cambios de Rexach, ya estaba sentenciado. El Barcelona no llevó peligro e, incluso, el Roma pudo aumentar su triunfo en una acción de Totti (m.85), sólo ante Reina pero enviando el balón fuera por poco. Luego, casi al final, Kluivert pudo acortar. Pero fue Tommasi (m.91) quien cerrase el marcador. La Roma se llevó un triunfo demasiado amplio para los méritos que hizo. Gracia al empate entre el Galatasaray y Liverpool, el barça sigue con opciones Rexach: "El resultado ha sido demasiado exagerado" En otra noche negra para el barcelonismo, el entrenador trató de dar explicaciones sobre tan dolorosa derrota. "Parece que la Roma nos haya dado un meneo, pero no ha sido para tanto", aseguró Carles Rexach. El técnico blaugrana, Carles Rexach, vivió ayer en Roma una noche que recordará de por vida, dada la trascendencia que el resultado, esa derrota ante el conjunto de Capello, puede representar en su trayectoria como inquilino del banquillo barcelonista.Anoche Charly apostó por un once novedoso, inventó una alineación que, a la postre, no le reportó nada positivo al Barça y lo justificó, en especial al hablar del cambio de banda de los interiores. "Buscamos la opción de disparo con el pie bueno, pero no dio resultado". Evidentemente, pero no fue el único error cometido por el equipo para vivir su segunda derrota en Europa: "Volvimos a cometer los mismos errores de la ida. Faltó algo de suerte y les regalamos el gol otra vez".Para Rexach fue un partido "de mucha lucha y poco fútbol" y consideró que tras el segundo gol "caímos en su trampa, entramos en el juego que ellos querían y perdimos los papeles, por lo que facilitamos su victoria".Un triunfo que consideró "exagerado. Miras el resultado final y parece que te hayan dado un meneo, cuando la realidad es muy distinta". Lo argumentó diciendo que el equipo romano "sólo chutó tres veces a puerta y marcó en todas, mientras que a nosotros no nos acompañó la suerte que ellos tuvieron para conseguir el primer gol".Dijo que la Roma "no me ha sorprendido en nada con su planteamiento", justificó la decisión de cambiar de banda a los interiores, Motta y Gerard, asegurando que "buscábamos que tiraran a puerta con su pierna buena, pero eso no ha sucedido".Pese a tratar de ser optimista, algo que complicaba el semblante con el que compareció anoche ante los medios en el estadio olímpico de Roma, Charly reconoció que resulta preocupante "lo acontecido en los dos últimos partidos: Nos han metido cinco goles y no hemos sido capaces de marcar ninguno, así que es lógico que me sienta preocupado por el rendimiento del equipo".Pese a todo lo acontecido, pese a la derrota escandalosa que acababa de sufrir, recordó que si la Roma gana a los turcos y su equipo al conjunto inglés en la próxima jornada "estaremos clasificados, y eso es en lo que debemos pensar". |
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Roma: Antonioli; Zebina, Samuel, Panucci; Cafú, Emerson, Lima, Candela; Totti (Cassano, m.87); Batistuta (Tommasi, m.72) y Delvecchio (Montella, m.46). Barcelona: Reina; Puyol, Christanval, De Boer, Sergi (Xavi, m.78); Motta (Overmans, m.65), Gerard, Luis Enrique (Rochmeback, m.82), Cocu; Rivaldo y Kluivert. Goles: 1-0. Min.61: Disparo de Candela que da en el tacón de Emerson y despista a Reina; 2-0. Min.74: Montella, en acción personal; 3-0. Min.91: Tommasi, de fuerte disparo. Arbitro: Kim Milton Nielsen (DIN). Mostró tarjeta amarilla a Delvecchio (m.36), Lima (m.37), Christanval (m.43) y Totti (m.52). Incidencias: Partido de la cuarta jornada, Grupo B, de la segunda fase de la Liga de Campeones de Europa, disputado en el estadio 'Olímpico' de Roma, que registró la presencia de unos 70.000 aficionados (apenas centenar y medio de barcelonistas). El Barcelona jugó con camiseta dorada y pantalón rojo, el Roma con camiseta roja y amarilla y pantalón azul oscuro. |
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