“Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo”
(Ludwig van Beethoven).
Todos los días cuando pongo los dedos sobre el teclado de mi ordenador intento decir algo nuevo, transmitir un mensaje que sirva para mejorar, aunque solo sea un poco nuestra convivencia, ese proyecto de vida en común, que la gente de bien estamos obligados a hacer llegar hasta el mejor de los puertos.
Hoy cumplo sesenta y tres años, y pienso como mi admirado Beethoven, que el gran proyecto de hacer posible una mejor convivencia merece que lo rompamos, porque las palabras que se emplean para conseguirlo llenan de contenido ese espacio vacio al que llamamos silencio.
Hoy cumplo sesenta y tres años, y me siento contento y orgulloso de tener en la palabra a la mejor amiga, la mejor aliada. He trabajado con la palabra en comunicacíon, publicidad, enseñanza, he disfrutado de la palabra con la lectura, escribiendo, conversando, comunicando... y pienso seguir poniéndome al teclado de mi ordenador para expresar lo que mi corazón me dice al despertarme cada mañana.
José Antonio Gracia Percebal.