cantera

Puyol, Xavi y Gabri

Los Crack de la
cantera Blaugrana

Todos los Crack de la Masia que han nacido después

Xavi.-Con sólo 20 años, ha necesitado una fortaleza mental digna de un veterano para sobreponerse a la presión de ser el culpable de que el símbolo Guardiola se quedara en el banquillo. La temporada pasada ya fue titular durante muchas jornadas por la lesión del capitán, pero la historia de este año ha sido bien distinta: en un partido copero de diciembre posterior al ridículo del Barça en Sevilla, Van Gaal decidió sentar al carismático 4, harto de oir que su equipo no funcionaba "porque tapaban a Guardiola". Desde aquel día, Xavi fue titular, con la delicada misión de dirigir al Barça, y, aunque se fajó poniendo al servicio del conjunto sus mejores virtudes (la movilidad, la recuperación de balones y la seguridad en el pase), el mono de la clarividencia de Guardiola que. experimentó el equipo reportató al de Terrassa una serie de críticas inmerecidas. Y es que, ¿a quién se puede exigir la genialidad en la dirección del que pasa por ser el mejor medio centro del mundo cuando está en forma? El resultado final fue que

tras la debacle del Bernabéu, Guardiola volvió al equipo, y éste empezó a carburar, lo que parecía condenar a Xavi; pero desde la suplencia, libre de presión, el egarense ha vuleto por sus fueros, e incluso es capaz de arreglar con su presencia partidos como el del sábado en Málaga, que estaba perdido con Guardiola en el campo.(4/4/00)

Gabri-Mucho más meteórica ha sido la eclosión de Gabri. Su actuación en el Mundial sub-20 de hace un año le valió entrar en la libreta de Van Gaal, y el de Sallent, después de una sensacional pretemporada, empezó la Liga como titular; justo hasta que Van Gaal decidió perdonar a Luis Enrique. Gabri lo tenía más que difícil jugándose el puesto de media punta con jugadores del calibre del asturiano, Litmanen, Ronald de Boer o Cocu, por lo que tuvo que volver a la áspera Segunda B en que milita el filial. Pero justo cuando entramos en la recta final de la temporada, las lesiones de Luis Enrique (hasta final de temporada) y Ronald de Boer (seis semanas), unidas al K.O. permanente de Litmanen, dan a Gabri una oportunidad de reivindicarse como el mejor de esta joven hornada. Y, por el momento, no está decepcionando, ya que, además de Su brega y su clase en el centro del campo, se está acreditando como un finalizador más eficaz de lo que él mismo cree:

cuatro goles en los últimos siete partidos. Los dos tantos que sellaron la victoria del Barça en Praga, unidos al decisivo penalty que forzó en Málaga, son la mejor prueba que, a sus 21 años, tiene madurez para asumir la responsabilidad que suponen tantos títulos en juego.(4/4/00)

Puyol.-La historia de Puyol es la del premio a la constancia. El pasado verano, cuando le habían convencido de que su sitio no estaba en el Barça y estaba decidido a marcharse al Málaga, Van Gaal decidió repescarle ante la falta de laterales. El melenudo defensa empezó la temporada en el filial, aparentemente olvidado pero aplicándose una máxima: "Si me echan, que no sea por vago".
Y, de repente, un día de octubre fue llamado para ir a Valladolid con los mayores: Desde entonces, no sólo no ha vuelto al B, sino que se ha hecho con la titularidad en el lateral derecho, mientras que todo un indiscutible en la selección holandesa como Reiziger lo ve desde la banda. El de La Pobla de Segur se ha ganado el corazón de la afición por su incansable entrega, y, aunque algunos le critican sus "despejes de regional", no cabe duda de que, cuando frene un poco su impetuosidad, demostrará la apreciable calidad que forjó en sus años como centrocampista. (4/4/00)