Tenía yo veinticuatro años cuando terminé de estudiar marketing, y aquel año circulaba una historia entre todos los juniors del Club de Marketing de Barcelona, en la que dos personas de recursos humanos mantenían el siguiente dialogo:
- De todos los que me han venido, creo que hay tres candidatos perfectos para el cargo.
- ¿Ves alguno que resalte por encima de los demás?
- Hay uno que tiene dos licenciaturas, y además es diplomado en Dragoning.
- Dragoning… Este es un súper especialista.
- Tienes razón, este será el hombre propuesto.
Lo que son las especialidades… Durante un tiempo pensé que era un especialista dentro de mi actividad, posteriormente pase a ser el mismo especialista, pero además ejercía de profesor, tiempo más tarde lo mío era la asesoría de empresas, todo esto también lo compartía dirigiendo eventos, después llegaron a decirme que era un hombre del Renacimiento, y a partir de ahí, ya me he perdido totalmente.
¿Qué c…ño soy? Pues soy lo que la vida ha querido que sea, y mirándolo bien pienso que la flexibilidad lo hace a uno duradero.